Acompañamos el crecimiento en la fe de nuestros niños y jóvenes a través de una educación integral y un itinerario de identidad marista en el ámbito del tiempo libre y contacto con la naturaleza. Al estilo de san Marcelino Champagnat, formamos buenos cristianos y honrados ciudadanos.
El proceso se inicia en 5º de Primaria y termina a los 25 años al finalizar la etapa de Comunidad, cuando la persona es perfectamente capaz de tomar la vida en sus manos y de desembocar en algún tipo de comunidad cristiana adulta. El objetivo es acompañar al joven de forma integral cuidando las diferentes dimensiones de su crecimiento, vivificadas desde la propuesta cristiana. Las opciones de nuestra pastoral juvenil son:
Reuniones semanales en grupo que se estructuran a través de las etapas y en torno a cuatro dimensiones: ser en Dios, ser libre, ser fraterno y ser solidario.
A lo largo del curso existen acampadas en el medio natural, convivencias locales y excursiones.
Celebramos la Pascua en todas las etapas del proceso conviviendo con los participantes del resto de colegios de la provincia marista Ibérica.
En un itinerario que va desde 5º de Primaria a 2º de Bachillerato cada verano se ofrece una actividad de dos semanas de duración en el medio natural.
Cobran especial importancia las últimas del proceso: Camino de Santiago y campo de trabajo en Sobrado de los Monjes.
Reuniones semanales en grupo que se estructuran a través de las etapas y en torno a cuatro dimensiones: ser en Dios, ser libre, ser fraterno y ser solidario.
A lo largo del curso existen acampadas en el medio natural, convivencias locales y excursiones.
Celebramos la Pascua en todas las etapas del proceso conviviendo con los participantes del resto de colegios de la provincia marista Ibérica.
En un itinerario que va desde 5º de Primaria a 2º de Bachillerato cada verano se ofrece una actividad de dos semanas de duración en el medio natural.
Cobran especial importancia las últimas del proceso: Camino de Santiago y campo de trabajo en Sobrado de los Monjes.
Nuestra pastoral juvenil es común entre todos los colegios de la provincia marista Ibérica. Se comparte el proceso, los contenidos trabajados en casa curso y las experiencias vividas, que son conjuntas a través de las actividades provinciales (convivencias, pascuas y campamentos de verano).
Nuestra pastoral, atendiendo a nuestra concepción de la persona, la educación y el cristianismo, propone un proceso de crecimiento compartido entre todos los alumnos y jóvenes de los colegios maristas.
Con la etapa de Comunidad termina propiamente el proceso de Pastoral Juvenil. Supone que los jóvenes dejan de serlo y articulan el conjunto de su vida adulta desde el seguimiento de Jesús, adoptando un estilo de vida evangélico, asumiendo su protagonismo en la Iglesia y testimoniando su fe en la sociedad desde el compromiso transformador en favor de los más necesitados.
Un animador de los Grupos Marcha es alguien que ha sido invitado por el Equipo de Coordinación de su centro para llevar adelante nuestro Proyecto. Esto supone que se trata de una persona en camino de ser: